‘Lo lógico es que hoy hubiera coalición de centroizquierda': Gaviria

El expresidente liberal anuncia que seguirá luchando por la candidatura presidencial de De la Calle

Foto: El Tiempo
Domingo 08 de Abril del 2018

"Yo no tiro la toalla fácil". Con esas palabras, el expresidente César Gaviria, jefe único del partido liberal, anuncia que seguirá luchando por la candidatura presidencial de Humberto de la Calle y que si ese aspirante no logra pasar a la segunda vuelta presidencial, el presidente electo "tendrá que contar con el Partido Liberal para gobernar". Notifica: "Uno no abandona las batallas en el campo".

Gaviria atribuye la culpa de que no exista una candidatura fuerte de centroizquierda "a la testarudez de Sergio Fajardo, que nunca aceptó al liberalismo". Para el jefe liberal, el país no aguanta más polarización ni agresiones personales.

Gaviria sostiene que "Iván Duque, si gana, no será títere" del expresidente Uribe. Y notifica que su partido hará que el Estado cumpla los acuerdos de paz en el próximo periodo.

Ninguna encuesta muestra favoritismo hacia el candidato liberal Humberto de la Calle: ¿se equivocó como jefe de ese partido escogiéndolo a él? 

Yo no escogí a De la Calle, lo escogieron los ciudadanos en una consulta abierta.

Viendo las cosas hoy, ¿no tenía razón Juan Manuel Galán cuando propuso no hacer consulta como se hizo sino haberla hecho con las elecciones parlamentarias?

Hay que partir de que la fecha la fijaron los otros cuatro precandidatos. Y lo que lo que nos propusimos era escoger una persona para participar en una consulta interpartidista, y así quedó consignado en la pregunta que se le hizo al electorado, con Sergio Fajardo, porque siempre pensamos que Fajardo aceptaría. Para nuestra sorpresa, Fajardo dijo que no. Que no quería ningún trato con el Partido Liberal, y su negativa no solo sacrificó su posibilidad de ser presidente sino que colocó en aprietos al Partido Liberal para presentar una candidatura más vigorosa. Lo lógico es que hoy hubiera una coalición de centroizquierda, como la hay de centroderecha. 

¿Por qué cree que definitivamente no la habrá? 

No la va a haber porque el doctor Fajardo dijo que él no quería saber nada del Partido Liberal, que no le interesaba, que no quería sus votos, y volvió imposible la consulta interpartidista. Y lo reiteró después de la reunión con De la Calle. Y hoy hay un escollo insalvable. Como el doctor Fajardo no participó en ninguna consulta interpartidista, eso hace aún más grave el problema legal. 

Pero hay dirigentes que lo acusan a usted, y no a Fajardo, de ser el responsable de los que usted llama "aprietos" actuales del partido liberal...

El doctor Fajardo ha hecho la campaña que él se propuso. Lo que sucede es que aún hoy dice que quiere participar con De la Calle y no con el Partido Liberal. Y hoy somos la bancada más grande del Congreso: obtuvimos casi 2 millones de votos para Senado y más de 2 millones y medio para Cámara. Algo que sí pasó fue el fenómeno Mockus. Con medio millón de votos en Bogotá, quedó como el líder político y cambió por completo el escenario electoral. El Centro Democrático perdió dos senadores. Y se presentó además la presencia vigorosa del Partido Verde. Ningún partido puede decir que salió muy ganancioso porque no es así; la presencia de Mockus, de los verdes y de Mira dio una vuelta al mapa electoral. El resultado del Partido Liberal fue satisfactorio y muy superior al de hace cuatro años. 

Pero esa fuerza liberal no se advierte en el proceso de elección de presidente... 

Es evidente que no hay suficiente asociación de nuestro candidato Humberto de la Calle con el pueblo liberal. 

¿La conclusión puede ser que De la Calle es un mal candidato?

De la Calle es muy buen candidato. Puede ser que no hayamos logrado que mucha gente que lo admira y respeta lo considere el mejor de los candidatos. Él sigue siendo el ciudadano con más alto nivel de prestigio y mayor favorabilidad. Pero hay que reconocer que esa ligazón no se ha dado.

"De la Calle es muy buen candidato. Puede ser que no hayamos logrado que mucha gente que lo admira y respeta lo considere el mejor de los candidatos"

Si él no logra pasar a segunda vuelta, ¿el fracaso es suyo o de De la Calle? 

No tengo problema en aceptar la responsabilidad que me corresponda. La tenemos un poco todos los que hemos participado en la política estos años. Pero sobre todo fue absurda la decisión de Fajardo de no aceptar la consulta con el Partido Liberal cuando hubiéramos podido tener una candidatura de centroizquierda fuerte que hoy no existe. Y no existe por la testarudez de Fajardo.

Si Humberto de la Calle no alcanza a pasar a la segunda vuelta, ¿qué hará el partido Liberal que usted dirige?

Nos tocará decidir entre los candidatos que queden qué hacemos y qué no hacemos, en el sentido de ver si encontramos suficiente voluntad para llegar a unos acuerdos que son esenciales para nosotros. 

¿Acuerdos sobre qué?

Por ejemplo, para nosotros el cumplimiento de los acuerdos de paz sigue siendo punto crucial, sobre todo con las decisiones que comprometen al Estado y que quedaron claramente definidas por la Corte Constitucional.

Si De la Calle no pasa a segunda vuelta, ¿usted seguirá como jefe único liberal?

Yo tendré que escoger un momento para retirarme de la dirección, pero yo no tiro la toalla fácil; en las campañas en que he sido director, he llegado hasta el último momento porque uno no abandona las batallas en el campo; yo tengo que tratar de llevar esto al punto de definir la relación del partido con el presidente que salga elegido, si no es nuestro candidato. 

¿Qué naturaleza de relación prevé usted?

Lo único que sí tengo claro es que los liberales no queremos una repetición de lo que hemos visto estos 16 años: polarización, dirigentes políticos agrediéndose de una manera inclemente; yo creo que la política hay que sacarla de ahí porque si no, van a ser los propios partidos políticos los que se encarguen de que nuestro sistema político haga una crisis y una implosión, como ha ocurrido en otros países.

¿Y esos ataques del exministro Cristo a Usted? 

Yo aún no entiendo sus reclamos, pero no he respondido sus agravios. Por lo demás, en esta campaña no he ofendido a nadie, no he atacado a nadie; ni siquiera me he defendido de las cosas que dijo el doctor Cristo; las dejé pasar. Ni me defendí de las que dijo el doctor Fajardo, las dejé pasar. Y las que dijo la señora Claudia. Las dejé pasar.

Cuando usted dice "Yo no tiro la toalla fácil", ¿quiere decir que gane o pierda De la Calle usted seguirá siendo jefe del Partido Liberal? 

Pues para eso me estoy preparando. Yo tengo un mandato de dos años. 

Se está preparando, dice usted, ¿para qué?

Nosotros somos la primera fuerza política en el Congreso, es difícil gobernar sin nosotros, cualquiera que sea el gobierno que llegue. 

Sea quien sea, ¿el presidente va a tener que contar con el Partido Liberal?

Sí, va a tener que contar con el Partido Liberal. 

¿Lo que está claro hoy es que De la Calle definitivamente va a primera vuelta?

Sí, señor. Eso es lo que hemos pensado y eso, lo que les vamos a proponer a las bancadas y dirigentes políticos en la bancada del martes. Estamos en el proceso de decidirlo la próxima semana en bancadas ampliadas con personas que no salieron elegidas miembros de las actuales bancadas. Esperamos que allí nos acompañen el candidato De la Calle y el doctor Cristo.

¿La bancada liberal en Senado y Cámara están totalmente unidas con usted?

Sí.

¿Cuándo le dijeron y cómo lo dijeron?

En la Cámara no hubo dudas. Los 35 representantes lo dijeron; las dudas estaban en el Senado, pero en la sesión del miércoles eso no quedó en duda, la totalidad de senadores acatan mi dirección y están de acuerdo en que es el momento de la unidad. 

¿La totalidad de los senadores, incluyendo el hermano de Juan Fernando Cristo? 

Sí señor, incluyendo al hermano del doctor Juan Fernando Cristo, con quien esperamos que la relación va a mejorar de manera fundamental porque la intención de todos y la supervivencia así lo exige. 

¿El senador Cristo reconoce su jefatura?

Sí, él reconoció mi jefatura, fue un gesto generoso que él no tenía que hacer. 

¿Usted qué hará para que el exministro Cristo regrese a la disciplina liberal?

Dejar atrás la animadversión que ha habido más de él conmigo que mía con él.

¿Se reunirá usted con Cristo?

Sí, sería conveniente hacer eso para borrar la sensación de división. A mí me parece conveniente, claro. Es que la decisión de no reunirse conmigo fue de él, no fue mía, yo he estado siempre dispuesto a reunirme y no he querido contestar ningún agravio, me callé esperando que se serenaran las aguas y ya se serenaron. 

En las encuestas gana el candidato Iván Duque hasta ahora, y a él no se le oye ni camorrista, ni ofensivo ni agresivo, ¿usted lo siente así?

Claro, es evidente que al candidato Duque es difícil presentarlo como el coco; las preocupaciones que uno tiene sobre él son que cuando al presidente Uribe se le calienta la cabeza, empieza a bombardear y genera unas mareas impresionantes. Duque se va a tener que mover en un mundo difícil.

"A Duque es difícil presentarlo como el coco; las preocupaciones que uno tiene sobre él son que cuando al presidente Uribe se le calienta la cabeza, empieza a bombardear"

El doctor Duque dijo: "Ni yo soy títere ni Uribe es titiritero", ¿usted cree eso? 

Sí, sí lo creo. 

¿Es decir que Iván Duque no va a ser tan manejable como alguna gente cree?

Eso no ha ocurrido nunca en Colombia, nunca. Acá no ha habido presidentes títeres de nadie. Y no creo que pase eso con Duque. Lo que ocurre es que Iván Duque tiene un pensamiento de centroderecha que es el pensamiento del Centro Democrático, y nosotros somos de centroizquierda; estamos comprometidos con el proceso de paz, y ellos están distantes y no se sabe qué piensan deshacer. Que no tengan duda de que se meterán en problemas si pretenden modificar los acuerdos si fueron validados por la Corte Constitucional. Se meten en problemas serios aquí en Colombia con la Corte Constitucional y con la comunidad internacional.

¿Usted cree que si gana la presidencia Iván Duque no va a gobernar Álvaro Uribe?

No quisiera yo que eso pasara porque no me parece conveniente.

Usted no lo quiere, pero digo, ¿lo cree?

No. Ese será un tema importante de medir en estos meses, pero no tengo razones para decir que Iván Duque va a ser títere o es títere.

Por otra parte, ¿a qué atribuye usted el éxito que ha tenido la candidatura Petro?

A la desesperanza, al descontento que se ha esparcido por el decrecimiento de la economía, a una confusión que se ha extendido en el resto del mundo. Hay un malestar muy grande y están en crisis los valores con los que nos educaron y la gente ha empezado a tomar distancia del capitalismo, de la globalización, de la democracia, de una serie de valores con los que nos formaron, y se ha generado una sensación de antisistema, de gente que empieza a decir que este sistema no está funcionando, y entonces él ha conseguido una credibilidad ahí en ese segmento, él es un candidato antisistema. Pero si a uno le preguntan qué es lo que va a hacer Petro, no tiene como responder. Él debe saber, por ejemplo, que no puede citar una constituyente el primer día de gobierno. Él lo dice y puede sonar efectista, pero él debe saber cuál es el procedimiento constitucional.

El senador Uribe, cuando fue presidente durante sus ochos años de gobierno, jamás contó para gobernar con el Partido Liberal. ¿Eso ocurriría con Duque?

No; pero mire: si algún partido ha demostrado que es capaz de gobernar y capaz de estar en la oposición es el Partido Liberal; es un partido grande, vigoroso, defenderá sus ideas, y no nos vamos a colocar nunca en una situación de oposición sistemática, vamos a defender las cosas en las que creemos. La Constitución y sus instituciones, los derechos humanos y la tutela, la Fiscalía General y el sistema acusatorio. La descentralización política, etc.

¿A usted le gusta más el liberalismo en la oposición o en el gobierno?

Estamos preparados para las dos cosas. Hemos sido gobierno y también, oposición. Obviamente es mejor gobernar que hacer oposición.

¿Qué piensa de la candidatura de Germán Vargas Lleras?

No lo puedo descalificar porque él está bien preparado, ha sido parte del gobierno del presidente Santos los ocho años, pero ha sido muy ambiguo en los temas de paz. Tengo la impresión de que la gente no lo ve como alternativa sino como Gobierno, porque tuvo una acción muy protagónica a lo largo de estos años; cuando lo ven no se imaginan que él es un cambio radical sino una continuidad. 

¿Usted como jefe del Partido Liberal se sentiría más cómodo al lado de Iván Duque o al lado de Germán Vargas?

No descalifico a nadie per se, o sea, los desacuerdos que vamos a tener, si los vamos a tener, con Germán Vargas o con Iván Duque no van a partir de ninguna clase de descalificaciones sistemáticas. Yo desde el principio, y en eso tuve desacuerdo con algunos miembros de la coalición, no fui amigo de pretender vetar al Centro Democrático o a su candidato, no lo quise hacer y no lo voy a hacer. Particularmente, en lo que tiene que ver con las dignidades y composición de las comisiones del Congreso. Aspiramos a que el debate sea sobre las ideas y no sea una mano de insultos, que fue lo que vivimos las elecciones pasadas y en las antepasadas: toda clase de agresiones verbales que solo hacen daño y no ilustran a los ciudadanos sobre opciones y caminos que el país tiene. 

¿Qué va a hacer el Partido Liberal si no va a segunda vuelta? 

Nuestras bancadas tomarán una decisión colectiva sobre qué es lo que más conviene y qué camino debemos recorrer. 

Es claro que los dos candidatos que van a segunda vuelta tienen que contar con el apoyo del Partido Liberal si quiere ganar. ¿Qué va a hacer el Partido Liberal?

No tiene que contar con el apoyo del Partido Liberal, tiene que contar con el apoyo del Partido Liberal para gobernar porque nosotros somos la fuerza poderosa en el Congreso, y si quieren nuestros votos, pues tendrán que estar dispuestos a asumir compromisos que no necesariamente implican participación en el Gobierno. 

¿Usted está dispuesto a hacer una coalición para la segunda vuelta?

Puede ser, depende de qué compromisos estén dispuestos a hacer; no estamos cerrados ni tenemos vetos. Excepto si se pretende destruir las instituciones. 

Quienes critican su jefatura dicen que usted no ha hecho un gran esfuerzo, no ha estado muy presente, que se ve desganado con la candidatura de De la Calle, que usted debería haber hecho más de lo hecho... 

Lo que pasa es que no me vieron en Semana Santa, así de sencilla es la respuesta. Otra vez dijeron que me había ido a dictar una conferencia a Dubái; sí, había asumido ese compromiso hace mucho tiempo y fui. Y también fui a recibir un honoris causa a la Universidad del Estado de Hidalgo. ¿Eso qué importancia tiene? Nada, absolutamente ninguna. Yo me he dedicado día y noche, y eso lo pueden decir los parlamentarios, a trabajar con ellos en la elección parlamentaria, yo me recorrí todo el país defendiendo las acciones del partido y a nuestro candidato. Eso de que no he hecho campaña no resiste análisis. Lo dijo el doctor Cristo y lo han repetido nuestros contradictores. Adentro del partido no existe esa idea. Me preocuparía que lo dijera De la Calle. Nos hemos debido coordinar mejor y no lo hemos logrado.

YAMID AMAT
Especial para EL TIEMPO