Sergio Fajardo: ‘Tenemos el talante para reconciliar al país’

El candidato dice que en su gobierno transformará a Colombia con una revolución educativa.

Foto: El Tiempo
Domingo 15 de Mayo del 2022
"Fajardo es el mejor. ¡Lástima que no le alcance!". La frase es del mismo Sergio Fajardo, y la adjudica a "la voz de la ciudadanía". Pero tan pronto lo afirma, apunta: "Nos alcanzará si votan así quienes así lo piensan y lo dicen".

Sergio Fajardo es candidato a la Presidencia de la República, por la llamada Coalición Centro Esperanza. Fue alcalde de Medellín y gobernador de Antioquia. Tiene maestría y doctorado en Matemáticas. Al perder en las elecciones presidenciales hace 4 años, aseguró que no volvería a ser candidato
¿Por qué decidió corregir?

Hace cuatro años, a estas alturas las encuestas eran muy similares y al final estuvimos tan solo a 200.000 votos de pasar a segunda vuelta. Estoy seguro de que en esta ocasión lo lograremos. Hace cuatro años, la ciudadanía eligió presidente, prisionera entre el odio y el miedo, y miren el deplorable resultado: cuatro años de mal gobierno de Duque. Que vuelva a ocurrir lo mismo, que otra vez se elija o el miedo o la rabia, como parece ser la intención de los punteros, sería lo peor. Y por eso es que estoy aquí, para demostrar que en Colombia no estamos condenados a dos únicas opciones de extremos.

Al perder, hace 4 años, usted dijo que nunca volvería a aspirar a la Presidencia, ¿se arrepiente de haber hecho lo contrario?

No me arrepiento. Llevo 22 años luchando por cambiar la política en Colombia, porque vale la pena apostar a una transformación real del país a partir de una revolución educativa, una de las grandes deudas que tenemos con la juventud.

Si no es elegido presidente, ¿volvería a intentarlo en el 2026 o aspiraría a otro cargo público?

Voy a ser presidente. Vemos la remontada en esta recta final de la campaña, pasaremos a segunda vuelta, le ganaremos a Petro sin reelegir a Duque.

Si le toca definir entre uno de los dos extremos, como usted los llama, ¿por cuál votaría en segunda vuelta?

No he contemplado esa posibilidad.

¿Qué debe pasar para que su candidatura repunte? ¿Lo cree posible?

Claro que es posible y lo vamos a lograr. Nuestro reto en estas dos semanas será el de conectar con las verdaderas angustias que hoy viven los colombianos. El país atraviesa un momento complejo. Pasó por una pandemia, una crisis social y un mal gobierno. Las personas tienen miedo y rabia, y por eso no se han conectado con la campaña presidencial. Tenemos las mejores propuestas, el mejor equipo, pero ante todo tenemos el talante para reconciliar al país consigo mismo. Representamos una política decente, serena que por fin puede unirnos en vez de seguir separándonos.

Si Gustavo Petro gana la primera vuelta, ¿haría usted parte de una eventual alianza para enfrentarlo en segunda vuelta?

No estamos aquí para atajar a Petro ni a nadie. Estamos para cambiar al país.

Pero si, al contrario, gana Fico Gutiérrez en la primera vuelta, ¿haría parte de una coalición política alrededor de Petro para enfrentarlo en la segunda?

Tampoco estamos solo para sacar al uribismo del poder. Aprovecho su pregunta para decirles a los colombianos que no se dejen engañar por las campañas que buscan anticipar la segunda vuelta al 29 de mayo con la tesis del voto útil. El voto en primera es para escoger la mejor opción y en segunda es para descartar la peor. Usted pierde su voto cuando no escoge la opción en la que cree y se deja llevar solo por las encuestas. Todos los días crece el voz a voz en la ciudadanía según el cual 'Fajardo es el mejor, lástima que no le alcanza', nos alcanzará si cada uno de los que piensa así vota a conciencia el 29 de mayo.

¿Cuál sería el futuro del país si la presidencia la gana Gustavo Petro?

Veríamos gobernando en la Casa de Nariño a Piedad Córdoba, a Armando Benedetti y a Gustavo Bolívar. Habría una gran inestabilidad política y económica, crisis fiscal y populismo en lo social en nombre de un supuesto cambio. Viviríamos cuatro años con el uribismo intentando tumbar al presidente, fatal para nuestra democracia.

¿Y cuál sería el futuro si la presidencia la gana Fico Gutiérrez?

Uribe-Duque, Pastrana y Gaviria gobernando desde la Casa de Nariño, en compañía de los clanes corruptos de las regiones, más de lo mismo. Y la gente en las calles en protesta permanente, denunciando el fraude electoral anunciado desde ya; tendríamos cuatro años a Petro dedicado a impedir que Federico gobierne. Además, Federico no está preparado para gobernar este país.

¿Cuál sería si la gana Rodolfo Hernández?

Tengo una buena relación con Rodolfo Hernández y compartimos la necesidad que tiene este país de luchar de manera frontal contra la corrupción. Ojalá se anime y nos acompañe en esta recta final para apostarle juntos al cambio.

¿Y cuál sería el futuro si gana usted?

Dejaríamos atrás la pelea permanente en la que hemos estado los colombianos y nos concentraríamos en resolver los problemas reales de las personas, a partir de una revolución educativa, que es el eje de nuestra propuesta. Estaríamos en modo cambio permanente, con respeto profundo a las instituciones, y avanzaríamos mediante consensos en las reformas estructurales que se han aplazado en los últimos años. Un país estable, que recuperaría la confianza en sí mismo, en el que los empresarios tendrían la certeza de unas reglas claras y estables, con el mejor equipo de gobierno, sin deberle nada a ningún expresidente ni clan político. Resolveríamos el profundo malestar expresado en el estallido social.

¿A qué atribuye usted el fenómeno Petro en las encuestas y en las plazas públicas?

Al hastío de los colombianos con el gobierno uribista de Iván Duque.

¿Cuáles serán los grandes problemas del país que debe enfrentar el próximo presidente de la república?

Inseguridad, hambre, desempleo y corrupción son los problemas más grandes que enfrentaremos el 7 de agosto. Es desastroso el legado de Duque, quien además desbarató las instituciones.

Hay quienes afirman que la Corte Constitucional cogobierna...

En mi gobierno, a diferencia de este, habrá respeto a la independencia de los poderes y a las decisiones de la justicia, estemos de acuerdo o no con ellas. No creo que la Corte cogobierne, sino que el gobierno Duque, con complicidad del Congreso, viola la Constitución y la ley de forma recurrente, y la Corte controla, como es su deber. Reitero que en mi gobierno ningún jefe de un organismo de control será mi amigo o simpatizante de nuestro proyecto político.

En política internacional, ¿cree necesario un nuevo tratado de límites con Nicaragua?

Sí, es necesario. Pero nuestra Constitución es clara en señalar que la definición de nuestros límites solo se puede realizar por medio de tratados internacionales ratificados por el Congreso.

¿Cuáles deberían ser los temas prioritarios en las relaciones entre Colombia y Estados Unidos?

Aunque continuamos siendo un aliado importante para los Estados Unidos, la relación binacional se ha debilitado por la injerencia interna del partido de gobierno en las elecciones; también por circunscribir la relación a la seguridad y las drogas frente a la ampliación de la agenda temática que se había logrado en años anteriores. Para nosotros será de suma importancia ampliar la discusión a temas como la educación, biodiversidad, ciencia y tecnología.

Pero se ha advertido que el gobierno del presidente Biden ha morigerado muchísimo su lenguaje sobre Colombia, que antes versaba fundamentalmente sobre narcotráfico...

Biden desde que era vicepresidente siempre estuvo comprometido por la paz en Colombia y seguirá comprometido, esa es la posición de los demócratas.

¿Qué piensa del uso del glifosato?

No a la aspersión aérea con glifosato. Está demostrado que es una estrategia fallida, ineficaz y costosa. No resuelve el problema, pero además contamina nuestras fuentes de agua, afecta los ecosistemas, los cultivos de los campesinos y la salud de las comunidades aledañas.

¿Cuál cree usted que es la solución para enfrentar el problema?

La guerra contra las drogas en Colombia es una guerra fallida. El abordaje que el mundo le ha dado al tráfico de cocaína, enfatizando la reducción de la oferta, ha sido fallido. Tenemos que aceptar que un mundo sin drogas no es posible y que el camino es la regulación. Si bien es un camino difícil que tomará tiempo, que se debe dar por pasos, Colombia tiene la autoridad moral para retomar el liderazgo perdido en la materia en el ámbito internacional. Hay que reorientar los recursos y la inteligencia de la Fuerza Pública y desmantelar la cadena del narcotráfico.

(También: Elecciones: Los candidatos presidenciales más buscados en Colombia).

El país vive gran incertidumbre política. ¿Peligra la inversión extranjera?

Sin duda. Continuar con un país sumido en paros y estallidos sociales impide escalar las inversiones en Colombia. Al mismo tiempo, un cambio que desmonte la institucionalidad ahuyentará la inversión. Por eso, somos la alternativa que tiene mayores posibilidades de generar una transformación estructural en nuestra economía, con una agenda de desarrollo productivo que aprovechará de manera estratégica las relaciones comerciales con el exterior, sin perder el norte en materia de estabilidad macroeconómica.

El TLC con Estados Unidos está cumpliendo diez años. ¿Ha sido bueno, regular o inocuo para el país?

Nuestra balanza comercial y el déficit en cuenta corriente muestran que no hemos logrado construir un flujo de exportaciones robusto con Estados Unidos. No se han materializado las transformaciones que fueron prometidas, y muchos productos colombianos enfrentan grandes retos para competir en igualdad de condiciones. Nosotros empezaremos por revisar los resultados de los tratados y de la política comercial. El objetivo será enmarcar la estrategia comercial dentro de nuestra política de desarrollo productivo, que tiene entre sus objetivos renovar la canasta exportadora colombiana.

¿Quiere decir que si es presidente revisará los TLC que el país ha firmado?

Tenemos que revisar los TLC para saber por qué no han funcionado, en qué condiciones están en este momento las relaciones internacionales de Colombia, qué ha pasado durante estos últimos años.

¿Es necesario arreglar relaciones con Venezuela?

Estuve el viernes en Cúcuta y desde la frontera la relación se ve muy distinta que desde Bogotá. El 8 de agosto abriremos los puentes fronterizos, abriremos nuevamente los consulados para atender a los colombianos que este gobierno abandonó a su suerte en Venezuela. Sin importar lo que opinemos del régimen de Maduro y las profundas diferencias que tenemos, es importante restablecer comunicación con el vecino más importante que tenemos. Además, para poder enfrentar los graves problemas de seguridad que tenemos en la frontera se necesita cooperación binacional.

YAMID AMAT
ESPECIAL PARA EL TIEMPO