‘Si hay constituyente, tiene que ser aprobada por el Congreso’: Luis Fernando Velasco

MinInterior dice que el Gobierno estudia cómo hacer efectiva su política de cambio y que no está ideando una constituyente sin consultar al Legislativo.

Foto: El Tiempo
Domingo 28 de Abril del 2024

¿Qué fue ese sentimiento de rechazo al presidente Petro, que marchó por las calles del país? ¿Qué lo originó? "Nadie ganó. Solo el Presidente perdió" dijeron opinadores políticos. Y no se trató de caminantes guiados por algún líder. El ministro del interior, Luis Fernando Velasco, así lo reconoce y le dijo a este cronista para EL TIEMPO, que las marchas no se pueden ignorar y que durante los "retiros espirituales" de todo el gobierno, que hoy concluyen, se analizan sus causas y sus efectos. El ministro Velasco, abre nuestro diálogo dando su opinión sobre las marchas.

- El presidente Petro representa un cambio. Este país en las últimas décadas ha sido manejado por una línea política, cercana al neoliberalismo, que tuvo una primavera de derechos liberales individuales en la Constitución del 91 con el señor expresidente Gaviria, pero que se ha ido apagando. Entonces llega el presidente Petro y genera un quiebre. Sectores de pensamiento conservador, como ese y otros partidos, incluyendo sectores del mismo partido liberal, pues ven amenazado lo que ha sido su manejo del poder y generan una serie de debates que calan en unos sectores de la opinión. Y entonces, obviamente, eso origina un rechazo frente al afán reformista, rechazo que en su momento sintieron otros presidentes, como López Pumarejo, a quien terminaron tumbando.

- ¿Y por qué cree usted que no aprendemos de la historia?

- Creo que nos han faltado dos acciones: una mayor pedagogía sobre cómo y cuáles son los cambios. Y entonces si nosotros no somos capaces de explicar que nuestras reformas son simplemente progresistas, pues se generan no solo rechazo, sino marchas como las que se han generado. Yo, más que meterme en la génesis de las marchas, quisiera más bien pensar en cómo reaccionar frente a esas marchas. Me parece que ese tiene que ser el papel del Gobierno. ¿Cómo reaccionar a unas marchas que representan un porcentaje importante de la población que no le gusta lo que estamos haciendo? No hemos sabido explicarles lo que estamos haciendo. Y en la confusión, pues se genera escepticismo.

- Pero observe, señor ministro, que no hubo un líder ganador, si no hubo un presidente perdedor...

- Comparto su tesis. En las marchas no hubo un líder, hubo un sentimiento. Hubo una estrategia muy inteligente desdibujando las acciones que hacemos y mostrando con mayor evidencia los errores que evidentemente hemos cometido. Y la gente sale a cobrarnos los errores. Y eso es legítimo en una democracia.

- El presidente de la Andi, Bruce Mc Master, decía hace unos días que no se trata de una actitud mesiánica, la del presidente, como creen algunos, sino la de un líder que no oye, que no escucha, que no dialoga, que está aislado, que falta a sus compromisos, que no cumple sus citas... ¿Qué deja esperando a sus invitados; no es eso, más bien, lo que está causando un impacto negativo contra el Presidente?

- Hablé largo tiempo con mi buen amigo Bruce y le he pedido que me ayude con su talante liberal, que me ayude a hablar con otros sectores que tienen unas críticas fuertes al gobierno y me hizo una observación, similar a su pregunta, que me pareció que vale la pena evaluar. Y por eso, mi papel de mantener puentes tendidos permanentemente.

- Pero el presidente habla permanentemente de "golpe blando"...

- Es un presidente, al que le allanan a su hijo un apartamento a las 03:00 y lo capturan al estilo extraditable; al que sin ningún tipo de pudor le filtran el video de la esposa de su hijo desnuda embarazada y lo filtra una agencia del Estado. Es un presidente que ha sido combatido, y es un presidente que también combate. Yo sí creo que vale la pena que todos nos serenamos, nos calmemos todos, todos. Pero cuando hablamos todos es todos. Porque no podemos decirle cálmese, Señor, cuando le estamos pegando a alguien.

- ¿Pero qué quiere decir "Cálmese"? ¿Quién?

- Todos los líderes de este país. Yo sí creo que estamos en un momento en que tenemos que ir más al debate de los temas de fondo que de las formas

- ¿Ese es uno de los temas de los retiros espirituales de este fin de semana?

- Eso no estaba programado. Se convocó hace un mes para revisar ejecución del Gobierno y para analizar el presupuesto 2025. Pero le abrimos un espacio, a la reflexión política. Análisis en general del momento político del país y cómo nosotros jugamos. Análisis del debate sobre pensiones...

- Esa reforma va a la Cámara...

- Pero tiene que volver al senado en la conciliación.

- Pero en caso de que la Cámara lo niegue o lo modifique...

- Con qué cambia un artículo hay que pasar para la conciliación. Y eso va a pasar en mi opinión. Una reforma de más de 90 artículos, va a tener algunas diferencias entre Cámara y Senado. Vamos a hacer conciliación y en la conciliación, la voz y los acuerdos que se han hecho con el Senado son muy importantes para lograr aprobar la conciliación.

- ¿Y usted qué opina, a propósito de la reforma pensional, de la andanada tan feroz de Nestor Humberto Martínez?

- Que es un buen abogado del dueño de los fondos de pensiones privadas.

- ¿Pero sus argumentos no tienen fuerza ni validez?

- Está haciendo una tarea que me parece legítima.

- A ver, hablemos un poco de usted. Hay una versión en el sentido de que en una reciente reunión del gabinete el presidente Petro habría dicho que a los ministros les falta ejecución. Y les falta hacer más como ministros y menos como candidatos presidenciales. ¿Se refería a usted? ¿Usted aspira a ser candidato?

- A lo que yo aspiro, y lo he hecho toda mi vida, es a hacer bien el trabajo que estoy haciendo. Cuando uno hace bien su trabajo, la vida lo llama para nuevas responsabilidades. Pero aquel que se ponga a hacer su actual trabajo, pensando en lo que sigue, le va a ir mal. Si la ciudadanía ve a algunos precoces candidatos presidenciales, tratando de mostrarse, los va a rechazar de inmediato. Yo estoy en este momento concentrado el 100% en mi tarea y en mi trabajo. Yo quiero entregarle al país unas reformas lo más ampliamente consensuadas.

- Pero es que ya están surgiendo sectores que hablan de su opción presidencial...

- Yamid. Hay dos actividades humanas en que la precocidad lo hace a uno quedar mal: La política y el sexo. Cuando uno es precoz en el sexo o en la política, le va mal. Yo estoy haciendo mi Ministerio del Interior. No me ponga a hablar de candidaturas presidenciales porque no las estoy pensando.

- Pero en redes sociales la gente está hablando de su candidatura...

- Sí. He leído a gente que lanza esa afirmación, pero también leo gente que me pide que me vaya. "Váyase, no lo queremos." O sea, este es un país en donde inevitablemente los que estamos en el debate público, terminamos para algún sector de la población siendo un ángel o un demonio.

- Otro tema: ¿En qué consiste una idea presidencial que él no ha querido precisar sobre una eventual constituyente?

- La Constitución del 91 fue de las pocas que se han hecho en Colombia como un acuerdo y no como resultado de un combate de un sector contra otro sector.

- ¿En qué consiste la idea presidencial?

- El Presidente nunca ha hablado de acabar la Constitución del 91 ni de suplantarla, porque él y su gente ayudaron a hacerla. Lo que ha dicho es que este país necesita acuerdos para concretar algunas acciones que están pendientes desde la Constitución del 91. ¿Cuáles acciones? Mayor equidad. ¿Una salud que llegue a todos? ¿Cuáles acciones? Una sociedad donde los viejos tengan posibilidad de tener una vejez digna. Esas acciones no las hemos concretado. Yo creo que en este país, nosotros deberíamos enfocar más energía en construir acuerdos en el Congreso que en construir Constituyentes, que es una salida democrática en un sistema presidencial y que en cualquier momento puede presentarse. Pero yo le gastaría más esfuerzo a seguir construyendo acuerdos en el Congreso.

- Una de las interpretaciones a las afirmaciones del presidente es que él estaría pensando en algún tipo de convocatoria para reunir una Constituyente sin pasar por el Congreso...

- Yo no veo institucionalmente posible hacer eso. A ver, nosotros ganamos con unas reglas de juego. ¿Cuáles fueron las reglas de juego? La Constitución del 91 y las leyes de la República. Y nosotros tenemos que respetar esas reglas de juego.

- Obviamente, no puede haber constituyente sin la aprobación del Congreso...

- No se puede hacer una Constituyente que vaya contra lo que está establecido en la Constitución del 91. Y si en la Constitución del 91 nos dicen que la Constituyente, para existir, tiene que ser aprobada por el Congreso, este gobierno y cualquier gobierno tiene que respetar esa regla.

- Esta entrevista se publica el domingo. Está terminando el periodo de retiro del Gobierno. ¿Con qué objetivo se hace esa reunión?

- El principal objetivo. Mire. Gustavo Petro. Quitémosle el aura de Caudillo. Gustavo Petro significa un proyecto político y ese proyecto político tiene que ser consecuente con lo que le propusimos a los ciudadanos.

- ¿Es decir?

- O sea, tiene que ser un proyecto político de cambio, tiene que ser un proyecto político efectivo, que dé resultados, tiene que ser un proyecto político alejado de escándalos, de corrupción. Eso es lo que la gente pide de nosotros. Y entonces lo que el presidente Petro hace al llamar a sus ministros es decirnos: "Bueno, señores, a ver si somos un proyecto político de cambio, ¿qué tanto hemos cambiado? Si somos un proyecto político efectivo, ¿qué tan efectivo somos, si somos un proyecto político alejado de la corrupción, qué hemos hecho para de verdad estar totalmente alejados de la corrupción?" El Presidente muy seguramente hará las acciones propias para que su proyecto salga adelante. Él siente una genuina angustia para que las cosas le salgan bien. De lo que él ha diseñado como su sueño de sociedad, que no es el sueño de él, que es el sueño de millones de colombianos que creen en eso. Pero eso tiene que ser no solo un sueño, tiene que ser una realidad. Y como somos gobierno, tenemos que convertirlo en realidad.

- Pero no habrá camino distinto al de recurrir siempre al Congreso...

- Yo defiendo ese camino porque estoy viendo resultados. La Ley Estatutaria de Educación es clave para el Gobierno porque es la que reconoce que la educación es un derecho fundamental y la acaban de aprobar por unanimidad en la Cámara de Representantes. Nos acompañaron los partidos de oposición a votarla. O sea, hay un espacio. La reforma pensional que mueve pasiones, que mueve intereses, nos la acaban de aprobar el Senado. La que más dificultades ha tenido es la reforma a la salud, que yo creo que es una reforma que todavía tiene salud. ¿De manera que yo estoy viendo que las cosas se están construyendo, pues entonces por qué desconocer el Congreso como un espacio para hacer los acuerdos?

- ¿Qué es lo que pasa en el orden público en Colombia? Porque Cauca, Nariño, Norte de Santander, parte de Antioquia, están muy afectados...

- Déjeme decir esto: Con gran habilidad nos han vendido la idea de que Colombia, antes de la llegada de Petro en materia de orden público, era Suiza y eso no es cierto. Colombia ha tenido en las últimas décadas unos problemas muy grandes de orden público y nosotros los estamos enfrentando. Mientras hacemos esta entrevista hay combates en el Plateado, una zona a la que no habían vuelto el Estado ni el Ejército, la estamos tratando de retomar.

- Que es la ruta del narcotráfico...

- Claro, el cañón del Micay. Por allá hace años no se veía el Ejército y hoy hay combates. Es porque nosotros estamos entrando, no porque ellos estén saliendo.